Oscar Avendaño y Los Profesionales + Astray y Los Impasibles
en Let's Go Rock Bar 21.03.2015
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| (foto: Rebeca G. Ibánez) |
Medianoche en un garito de Parla, unos juegan al billar y otros al futbolín mientras los habituales del local desafían a los músicos en cada parón, entre cervezas y vaciles. Un señor se viene arriba y hace headbanging. Lo que suena es rock and roll pero, para el caso, viene a valer igual. Es viernes y estamos en el profundo extrarradio madrileño. La razón, un concierto gratuito de Oscar Avendaño y Los Profesionales, que presentan por primera vez por aquí Demasiado oro, su primer largo, publicado ahora hace apenas un año.
La situación, por rara que parezca, termina siendo acogedora, y tras un interesante acercamiento a la música de Astray y Los Impasibles, anfitriones de Los Profesionales en este fin de semana en la capital, queda claro que esos músicos de ahí arriba están por encima del lugar y del nivel de expectación. Lo que, egoístamente, podríamos considerar un lujo. Israel Ruiz aka Indy Tumbita se luce en cada solo con esa actitud que solo sería pose cuando no es creíble, no siendo el caso, sintiendo cada nota desde el primer momento con la instrumental Los Fortunas, tan propia de otro de sus proyectos, Pedrito Diablo y los Cadáveras. Oscar Avendaño está obviamente al frente de todo esto, fiero y con ganas de mostrar sus canciones, echando mano de la armónica y demostrando el rodaje de una banda y un proyecto que difícilmente puede verse por estos lares habitualmente. Mauro Comesaña, pilar de una banda como The Soul Jacket, aporta empaque y estilo desde la batería, al igual que un excelente Andrés Cuña al bajo y coros. Por desgracia, no pudo estar presente en este mini tour madrileño Xabier Vieitez, dueño del teclado en Los Profesionales. Aún sin esa parte, clave en temas como el single El suelo, otra vez, la ocasión sirve para comprender que lo que empezaba como proyecto personal de Avendaño, con larga experiencia en Los Casanovas o Siniestro Total, ha dejado de ser vía de escape de sus inquietudes más íntimas y se ha convertido en una banda, con todo lo que eso conlleva.
Porque canciones como Póster central o Siéntate y mira suenan a banda, tienen el aroma de esos clásicos del rock español que desnudos, en acústico, quizá funcionen pero que emocionan realmente cuando no se repara en gastos y despliegue. De la misma forma, las canciones de su primer EP, de un tono mucho más acústico y en las que el ingenio era una de sus mayores bazas, resultan difícilmente trasladables a una formación más ambiciosa, pues en la sencillez está su esencia. La noche, que no iba a alargarse en exceso, iba de rock, y si poco antes Astray versionaba en modo swing Qué hace una chica como tú en un sitio como este Los Profesionales elegían otra fundamental de los de La Elipa como Ginebra seca, reivindicando de algún modo su propio convencimiento por y para el rock en español, que hace ya mucho cuenta con voz propia. Los de atrás seguían a lo suyo, y aunque el propio Avendaño ya canta lo de “y a mí me sobró tiempo para comprender que esta historia no me iba a dar de comer”, tratar así de bien a las canciones y a la profesión guarda un éxito en sí mismo. Perdí mis gafas de sol y cierre, sin bises, un par de púas para el joven punkie de la primera fila y a por la próxima. Esta noche, Oscar Avendaño y Los Profesionales estarán junto a Astray y Los Impasibles en Wurlitzer Ballroom (Tres Cruces, 12).
Porque canciones como Póster central o Siéntate y mira suenan a banda, tienen el aroma de esos clásicos del rock español que desnudos, en acústico, quizá funcionen pero que emocionan realmente cuando no se repara en gastos y despliegue. De la misma forma, las canciones de su primer EP, de un tono mucho más acústico y en las que el ingenio era una de sus mayores bazas, resultan difícilmente trasladables a una formación más ambiciosa, pues en la sencillez está su esencia. La noche, que no iba a alargarse en exceso, iba de rock, y si poco antes Astray versionaba en modo swing Qué hace una chica como tú en un sitio como este Los Profesionales elegían otra fundamental de los de La Elipa como Ginebra seca, reivindicando de algún modo su propio convencimiento por y para el rock en español, que hace ya mucho cuenta con voz propia. Los de atrás seguían a lo suyo, y aunque el propio Avendaño ya canta lo de “y a mí me sobró tiempo para comprender que esta historia no me iba a dar de comer”, tratar así de bien a las canciones y a la profesión guarda un éxito en sí mismo. Perdí mis gafas de sol y cierre, sin bises, un par de púas para el joven punkie de la primera fila y a por la próxima. Esta noche, Oscar Avendaño y Los Profesionales estarán junto a Astray y Los Impasibles en Wurlitzer Ballroom (Tres Cruces, 12).
Texto de Bruno Corrales
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